Estos acontecimientos no habían pasado en España desde que yo tengo memoria; y tengo ya más de medio siglo. Nunca…
Ya está bien de aguantar a estos hijosdeputa. Hay que acabar con ellos… Ya.
Ni los siento, ni se sienten compatriotas nuestros; no son paisanos, no son nuestros amigos; no son más que una manada de perros, ni siquiera lobos, babeando de rabia ponzoñosa… Han perdido su cualidad humana, a fuerza de enterrarla bajo el odio, la ignorancia y el racismo más rancio y exacerbado.
Nos quieren echar de nuestras propias casas…
Y una mierda… ¡A por ellos!