Decía mi abuelo:
“Quien tiene que levantar la mano, y no da; luego, no tiene fuerza pa’ná…”
Españoles… el independentismo catalán os afrentó grave, repetida, flagrante e impunemente, hasta el punto crítico de obligaros a tomar la crucial decisión de ejecutar, nada menos, que el artículo 155 de la Constitución…
Uuuh, qué miedo…
Por todo ello, tengo varias preguntas que haceros…
¿Cómo es posible, que fuéseis tan pacatos y cobardones; tan rebañudos y tan menguados, como para ceder ante el chantaje insensato de convocar elecciones, solo cuarenta o cincuenta días después de veros obligados a ejecutar semejante articulo de vuestra Constitución…?
¿De verdad creíais, los egregios miembros de vuestros gobiernos y vosotros mismos, ¡estúpidos! que se puede cambiar la opinión y la idiosincrasia, la deriva peligrosa o el error de una sociedad enviscada, en cuarenta o cincuenta días…?
“La luz de repente, dejaría a los ciegos, más ciegos todavía”
¿Cómo es posible que sin arrancar la raíz, queráis acabar con la hiedra?
Hace unos años el gobierno británico se vio, como el vuestro, obligado a suspender la autonomía de Irlanda del Norte; pero al contrario que el vuestro, lo hizo durante los meses necesarios hasta que la situación -según un minucioso y cuidadoso plan trazado previamente- se normalizó, y la cordura volvió a regir en una sociedad, antes manejada, sectaria y hasta pervertida en muchos sentidos… No menos que la sociedad catalana lo está hoy en día… ¿Y vosotros queríais conseguir eso en cuarenta o cincuenta días…?
¿No os da vergüenza lo que le estáis haciendo a España y a vosotros mismos…?
No os ha ganado la partida cocomocho, el estrábico o la llorona, no… Os la ha ganado TV3 y el resto de medios públicos, apesebrados, abducidos y felones, que no os habéis atrevido a meter en cintura… Os ha tumbado el pulso esa administración autonómica corrupta, viciada y abducida…
Se ha reído de vosotros toda esa pérfida “mafia educativa”, mendaz y pegajosa, que lleva parasitando e insidiando a la sociedad catalana desde hace más de treinta años… los mismos que lleváis vosotros consintiéndolo…
Perdonad el mal gusto de este comentario, pero tengo que decirlo: es igual como cuando aquel energúmeno le estampó una ostia en la cara a Mariano Rajoy, en medio de la calle, impunemente… Y no hicimos nada, ya que por la calle va el gañán, tranquilamente… Como español me siento igual: me han dado una ostia que, aunque yo sí quiero, no puedo contestar por impotencia…
Eres un pusilánime; un pueblo al que su abulia le ha hecho consentir una enorme afrenta, y al que su cobardía le ha empujado, a no atreverse a contestarla con la valentía y contundencia que semejante afrenta merecía…
Os estáis cubriendo de gloria, españoles; habéis estado cumbre gestionando lo de Cataluña… Vuestro nombre será recordado como:
“El pueblo que tuvo que levantar la mano, y no se atrevió a dar…”
Abulia y cobardía…
Antonio Rodríguez Miravete